Preocupación en el Vaticano por el papa Francisco: «No estoy bien de salud»

Durante una reunión con rabinos europeos, el Sumo Pontífice se disculpó y prefirió «no leer el discurso, sino dárselos y que se lo lleven». Sin embargo, mantiene su agenda de este lunes.

El papa Francisco generó preocupación durante un encuentro con rabinos europeos en el Vaticano donde afirmó que no está bien de salud y decidió no leer el discurso que había preparado ya que tenía la voz afectada y le faltaba el aliento, aunque mantiene su agenda para este lunes.

«Gracias por esta visita que a mí me gusta tanto, pero sucede que no estoy bien de salud y por esto prefiero no leer el discurso sino dárselos y que se lo lleven», explicó el Sumo Pontífice, quien tiene 86 años.

El vocero del Vaticano, Matteo Bruni, aclaró en un comunicado que «el papa Francisco tiene un poco de resfriado y un largo día de audiencias. Quería saludar individualmente a los rabinos europeos y por eso les entregó su discurso escrito. El resto de sus actividades continúa regularmente», agregó.

A pesar de sus problemas de salud, Francisco mantuvo la agenda de actividades prevista para la jornada: se reunió 40 minutos con el líder catalán Pere Aragonés y esta tarde recibirá a cerca de 7.000 niños de 84 países en el marco de una iniciativa vaticana por la paz.

En junio pasado, el Papa pasó varios días internado en el hospital Gemelli de Roma por una operación abdominal y luego del alta presentó algunas dificultades para respirar. Desde ese momento se recuperó e incluso participó de las Jornadas Mundiales de la Juventud que se realizaron en el mes de agosto en Portugal.

El papa Francisco llamó a que «la gente no se mate más en las guerras»

El papa Francisco llamó a que «la gente no se mate más en las guerras» al visitar un cementerio dedicado a los caídos en la Segunda Guerra Mundial, donde reflexionó sobre los conflictos bélicos: «Tantos muertos inocentes, tantas vidas truncadas, las guerras son siempre una derrota. No hay victoria total», sostuvo.

En el marco de la guerra entre Israel y Hamás, el Sumo Pontífice se mostró preocupado por la escalada de la violencia y pidió ayuda humanitaria para Gaza y liberación de rehenes. El miércoles pasado visitó un cementerio dedicado a los caídos en la Segunda Guerra Mundial donde reflexionó sobre las guerras que envuelven al mundo.

Durante su discurso señaló que «no puedo no pensar en las guerras de hoy. ¡Tantas personas jóvenes y no jóvenes en las guerras del mundo, incluso en las más cercanas a nosotros! ¡Cuántos muertos!», lamentó el pontífice durante su homilía en ocasión de la misa dedicada a los difuntos, un día feriado en Vaticano.

El Papa visitó el Cementerio de la Guerra de Roma, en el que se rinde homenaje a los soldados del Commonwealth que lucharon contra el nazismo durante la Campaña de Italia, entre noviembre de 1943 y julio de 1944. Allí hay 426 lápidas, la mayoría de jóvenes en torno a los 20 años de origen británico, pero también canadienses y sudafricanos.

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